Se suele decir que el día más feliz de una pareja enamorada, es el día de celebración de la boda. Las razones de tal argumento son múltiples, ya que es un día irrepetible, de alegría, fiesta y celebración, acompañados de todas aquellas personas que significan cosas importantes en nuestra vida, como la familia, los amigos… es un día inigualable, único… para el que los novios llevan mucho tiempo preparándose y para el que solo desean estar plenamente felices, radiantes… y guapos, muy guapos.
Con la entrada de la novia camino del altar, todas las miradas y objetivos de las cámaras fotográficas se volcarán en ella, por lo que se debe planificar ese día con la suficiente antelación, con el fin de poder corregir estéticamente aquello que nos puede llegar a molestar. Y una de las mejores cartas de presentación para un día tan especial puede ser lucir una preciosa sonrisa, una sonrisa blanca y radiante como la novia. Veamos, cuáles son los tratamientos más demandados por los novios:
– Blanqueamiento dental. Debemos tener siempre presente que el color de nuestros dientes depende en primer lugar de cuestiones genéticas, ya que el color del esmalte dental está determinado por el color de la dentina, siendo esta la capa que rodea la parte interna de los dientes y que está situada debajo del esmalte dental. Y, en segundo lugar, se debe tener en cuenta que el esmalte dental puede mancharse u oscurecerse como consecuencia de nuestros hábitos alimenticios, ya que algunos alimentos y bebidas, como el té, el café o el tabaco pueden causar manchas en las piezas dentales. Con el blanqueamiento dental lo que se consigue es rebajar varios tonos el color natural de nuestros dientes dejándolos más blancos y brillantes. Lo que blanquea el diente es un agente químico denominado peróxido de hidrógeno o gel blanqueador que el especialista aplica junto con láser, luz led, luz fría de plasma, etc. los cuales sirven para acelerar y activar la actuación del gel. En el mercado también existen tratamientos blanqueadores que se pueden realizar en casa, si bien los especialistas alertan del daño que se le puede causar a nuestros dientes si se realiza sin el control médico adecuado, por lo que Consejo dentistas, la Organización Colegial de Dentistas de España, trabaja de forma independiente e imparcial por la ordenación profesional, la calidad de los servicios odontológicos y los principios éticos y deontológicos, para que este tipo de productos solo salgan al mercado si cumplen con todas las garantías.
– Brackets linguales. Este tratamiento se utiliza para corregir y alinear la posición de los dientes en la cavidad bucal, mediante la colocación de backets solamente en la cara interna de las piezas dentales, con lo que se consigue que el tratamiento pase prácticamente desapercibido desde el exterior.
– Ortodoncia invisible. Esta técnica se utiliza igualmente para corregir, de una forma gradual e imperceptible, la posición de las piezas dentales mediante unos alineadores transparentes realizados en exclusiva para cada paciente. Este tratamiento sustituye, cada vez con más fuerza, a los conocidos brackets por su comodidad, buenos resultados y por ser prácticamente imperceptibles.
– Carillas dentales. Este es un tipo de tratamiento puramente estético. Consiste en la colocación de unas pequeñas láminas que se pegan mediante una resina especial encima de los dientes para mejorar la imagen personal. Existen dos tipos de carillas, composite y carillas de porcelana. Las primeras son más económicas, pero se pueden romper o perder su color fácilmente, mientras que las segundas son de mejor calidad y por lo tanto mantienen su aspecto durante más tiempo. Ambas son muy utilizadas estéticamente cuando existen determinados problemas de roturas de dientes, piezas dentales muy pequeñas o muy cortas, dientes muy separados o diastema, para cubrir ese espacio interdental, etc.
– Contorneado dental. Esta técnica también conocida como ameloplastia, que consiste en eliminar pequeñas cantidades de esmalte de las piezas dentales para variar su longitud, forma, etc. Está indicada para personas que solo necesitan unos pequeños retoques como podría ser arreglar un diente un poco torcido, una pieza dental demasiado puntiaguda o disimular algún diente roto. Es una técnica muy poco invasiva, que se realiza sin anestesia pero que consigue un gran efecto estético.
Los protectores bucales
Los protectores bucales se utilizan para prevenir traumatismos dentales. Existen dos tipos:
– Los protectores bucales tipo standard: Son los más económicos. Se venden en tiendas de deporte y son moldeables, pues están realizados con un material que si se muerde tras haberlo introducido en agua caliente se adapta a la forma de la boca.
– Protectores hechos a medida: Son personalizados, es decir realizados a la medida de cada persona, por lo que su ajuste es perfecto y la protección es total. Este tipo de protectores son los que utilizan los deportistas profesionales.