Soluciones tecnológicas contra la contaminación

La contaminación es un problema más que visible. Solo hay que comprobar cómo se encuentran algunas de las principales ciudades del país con sus episodios de contaminación. Bien es sabido que los políticos no hacen nada, solo mero gestos que no sirven para nada. Por eso, es hora de que los ciudadanos nos pongamos manos a la obra, no solo con manifestaciones o con comentarios de Twitter, sino a poner en marcha.

Como ves, la rápida industrialización ha dado lugar a innumerables accidentes que han contaminado los recursos naturales en el planeta con materiales tóxicos y otros contaminantes, amenazando a las personas y los ecosistemas con graves riesgos para la salud. Tengo claro que la ciencia es la mejor aliada contra la contaminación. Las tecnologías convencionales son efectivas en cuanto a la inactivación microbiana pero, en la mayoría de los casos, son procesos agresivos que pueden generar una pérdida de las propiedades sensoriales de los alimentos.

Aire contaminado

El aire es uno de los agentes más perjudicados, son muchos los inventos que intentan solventar estos problemas. Por ejemplo una pulsera que purifica el aire, un proyecto de Alexandr Kostin un joven investigador ruso. Hand Tree, es el nombre que ha recibido este innovador brazalete, que funciona filtrando el aire contaminado para convertirlo en oxígeno.

Los coches siguen siendo el gran problema de las ciudades, son los que más contaminan. Desde hace años la empresa Bosch desarrolla el sistema Start&Stop. Una tecnología que nos permite ahorrar combustible y reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera. Cuando el coche se detiene, por ejemplo en un semáforo o un atasco, automáticamente apaga el motor. Para que se vuelva a encender simplemente hace falta pisar el embrague. Es un pequeño paso, pero todo suma.

En España, concretamente en Sevilla, han puesto en marcha un sistema que permite limpiar el aire del interior de los autobuses. La tecnología situada en el sistema de climatización de este transporte disminuye un 20% los valores de polución iniciales. Hispacold es la empresa encargada de la comercialización que hace que la polución del aire interior es uno de los mayores riesgos ambientales para la salud de los ciudadanos.

El cemento

De acuerdo a la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), el cemento es el componente principal del hormigón. Y la producción de hormigón es la responsable del 3.4% de la generación de dióxido de carbono en el mundo. Investigadores de la Universidad de Puerto Rico trabajan con nanomateriales para contrarrestar la contaminación generada por la fabricación del hormigón.

Una de las estrategias más novedosas para la limpieza ambiental es utilizar bacterias que se alimentan de los residuos tóxicos. Esta técnica se ha empleado exitosamente en casos de derrame de petróleo, en agua y suelo. Hoy, la biotecnología moderna puede modificar genéticamente bacterias para hacer más eficiente este trabajo de descontaminación.

Plásticos

Otro punto muy importante son los plásticos. Según los datos, uno de los materiales que más contaminan y que más perduran en el tiempo.  Por eso es vital que empresas como Plásticos Genil, un líder dentro del sector trabaje en pos de la no contaminación.  Lo más llamativo es que una bolsa de plástico tenga un tiempo de uso medio de entre 12 y 20 minutos y tarde entre 15 a 1000 años en descomponerse. Por lo que cuando tengas que tirar una a la basura piensa un poco en esto. Otra cifra que sorprendente: con el petróleo que se necesita para fabricar 14 bolsas de plástico, un coche podría recorrer 1,5 kilómetros.

En Plásticos Genial, hacían bolsas para comercio baratas por lo que era mucho el nivel de producción. Fueron introducidas en la década 70 para transportar la compra y se hicieron muy populares ya que los supermercados las distribuían gratuitamente, ahora ya las cobran, lo que ha provocado un descenso en su consumo.

Las bolsas de plástico para comercio no son necesariamente tóxicas. Aunque no es recomendable meter alimentos directamente en ella, sí podemos lavarlas y reutilizarlas para almacenar otros alimentos cuya superficie no esté en contacto directo, como las patatas, los pepinos. De esta manera estaremos ayudando a la conservación del planeta, y que narices, también a nuestra economía.

Como has podido comprobar, la tecnología se ha convertido en el mejor referente para luchar contra la contaminación. Sin embargo, también tengo claro que la  mejor forma de combatirla, es la concienciación entre todos los ciudadanos. Y lo mejor es comenzar por el reciclaje.

 

subscribite al boletín informativo