El pasado 7 de junio se celebró el Global Running Day y de este deporte os queremos hablar para ayudaros a mejorar la reputación de vuestra empresa. Yo lo conocí hace unos años, en los que me dio por correr para poder perder peso y tonificar mi cuerpo. Lo primero lo conseguí principalmente gracias a un tratamiento adelgazante que hice en la clínica de medicina estética Arte Estética. Fue una gran experiencia, porque apenas pasé hambre, los doctores me fueron motivando cada vez más, y me enseñaron de nuevo a comer, que es lo más importante en estas ocasiones. Eso sí, yo no quería volver a ganar ese peso, por fin me sentía ligera, así que decidí, como os decía, decantarme por el deporte para tonificar mi cuerpo, y me apunté entonces a las carreras populares.
Eso sí, tengo que decir que en Arte Estética también me ayudaron con diversos tratamientos para que mi piel no estuviese fofa y me sintiese bien con mi cuerpo, pero yo quería todavía algo más, algo de músculo, y además un amigo me comentó que muchas carreras tenían un fin solidario, algo que me motivaba mucho. Cada vez son más las personas que acuden a este tipo de eventos, y los corredores valoran las marcas que patrocinan estas carreras, y son una gran masa, nada despreciable y muy a tener en cuenta por parte de las empresas.
En los últimos años han proliferado las carreras populares y maratones en toda España, al mismo tiempo que lo ha hecho el número de corredores. En efecto, estos se han duplicado en el último lustro según la Universidad Pompeu Fabra. La creciente promoción de la salud a través del deporte es, sin duda, la gran responsable de este incremento. Los ciudadanos tienen, cada vez más, una mayor conciencia deportiva, pues se asocia la práctica física habitual con salud, lo que conduce a que el running se convierta en casi una forma de vida. Además, las redes sociales han reforzado el concepto de culto al cuerpo, con lo que muchas personas utilizan el running como medio para mejorar su físico, como fue mi caso al complementarlo con el tratamiento adelgazante de Arte Estética. Además, otro de los motivos del incremento de runners es el efecto crisis. La ciudadanía se ha apoyado en el deporte para canalizar situaciones de estrés o tiempos muertos a consecuencia del desempleo. Las carreras se han convertido en el máximo exponente de este efecto crisis.
Sin embargo y más allá de estos aspectos, ¿cuánto pesa la solidaridad cuando hacemos deporte? No hay que olvidar que la mayor parte de las carreras populares y eventos deportivos tienen tras ellos una causa solidaria. Causa que tiene fuerza suficiente para que un corredor se decante por un evento u otro. De hecho, el 73 por ciento de los corredores habituales declara que la causa solidaria es determinante para inclinar la balanza cuando coinciden dos maratones en el mismo tiempo, de ahí que el hecho de patrocinar estas carreras ayude a crear una buena imagen de marca y una gran reputación para nuestra empresa. En números, el peso de la solidaridad en las carreras populares es el principal acicate para el 34% de los corredores, por detrás de la práctica deportiva, que se sitúa como la motivación más escogida por el 50%.
Por sexos, se observa que la solidaridad pesa más entre las mujeres, ya que en su caso un 44% sitúa la causa solidaria en primer lugar, mientras que entre los hombres la cifra cae hasta el 21%. Este dato refleja que los roles tradicionales por género siguen teniendo calado. Entre las mujeres se ve más reforzado el valor empatía y se inclinan por la parte más social, mientras que entre los hombres siguen pesando más otros aspectos como la marca personal.
Correr, la nueva forma de ser solidario
Colaborar con ONG, parroquias, hacer donaciones, realizar voluntariados…, existen múltiples formas de ser solidario, pero lo cierto es que no siempre resulta sencillo canalizar esta solidaridad. Por un lado, está el factor desconfianza, pues existen multitud de entidades sin ánimo de lucro y no siempre tenemos claro el destino de nuestros fondos; y, por otro, la vorágine del día a día (trabajo, familia, etc.) a veces no nos deja tanto tiempo como nos gustaría para contribuir con causas sociales. Por este motivo, participar en carreras populares se está convirtiendo en una opción en auge para ser solidario, pues solo nos compromete unas horas y tenemos la certeza que el importe de nuestro dorsal irá dirigido a sufragar una causa social.
En efecto, muchos corredores creen que las carreras son la mejor forma de canalizar su solidaridad, al no disponer de tiempo o recursos suficientes para colaborar de otro modo con causas sociales (voluntariado, donaciones económicas, etc.).
La violencia de género y la salud son causas en auge con las que nos sentimos más identificados. Tanto mujeres como hombres priorizan la violencia de género y la erradicación de enfermedades, si bien varía la intensidad de esta sensibilidad. En otras palabras, un 78,6% de las encuestadas escoge la violencia de género como una de sus causas top 3, cifra que cae hasta el 46,3% entre los hombres. La erradicación de enfermedades se sitúa en segundo lugar en ambos casos, pero alcanzando al 62,5% de las encuestadas frente al 39% de los hombres. Entre ellos, sin embargo, pesan más otras causas como la inclusión de las personas con discapacidad (un 36,6% de los hombres la escoge, frente al 30,1% de las mujeres) y los conflictos y dramas bélicos, escogidos por el 34,1% de los hombres y el 30,4% de las mujeres).
Si toda esta gran masa de gente que se ha apuntado al deporte de moda ve el logo o el nombre de nuestra empresa en medio de un evento deportivo y de carácter solidario, nuestra reputación crecerá, y también podremos irnos a dormir sabiendo que lo estamos haciendo bien en materia de responsabilidad social corporativa.